Los gases fluorados son compuestos químicos gaseosos que contienen flúor, carbono y, a veces, otros elementos como cloro, hidrógeno o bromo. Son comúnmente utilizados como refrigerantes. Estos gases refrigerantes también pueden ser conocidos como hidrofluorocarbonos (HFC), clorofluorocarbonos (CFC), perfluorocarbonos (PFC) e hidroclorofluorocarbonos (HCFC).

Sin embargo, muchas de estas sustancias han sido identificadas como responsables de la destrucción de la capa de ozono y del cambio climático, por lo que han sido progresivamente reemplazadas por alternativas menos dañinas para el medio ambiente. La Unión Europea, a través de regulaciones específicas, está reduciendo el uso de estos gases para alcanzar los objetivos climáticos del Green Deal europeo y del paquete 'Fit for 55', que apunta a una reducción del 55% de las emisiones para 2030 y a la neutralidad climática para 2050.

¿Qué tipos de gases refrigerantes existen?

Hay varios tipos de gases refrigerantes disponibles, pero los principales son los siguientes:

  • Clorofluorocarbonos (CFC): estos gases refrigerantes eran muy populares en los años 80, pero han sido gradualmente eliminados debido a su impacto negativo en el medio ambiente, ya que son conocidos por dañar la capa de ozono.
  • Hidroclorofluorocarbonos (HCFC): estos gases refrigerantes fueron utilizados como alternativas a los CFC porque son menos dañinos para la capa de ozono. Sin embargo, también han sido progresivamente eliminados debido a su impacto ambiental.
  • Hidrofluorocarbonos (HFC): estos gases refrigerantes son una de las alternativas más comunes a los CFC y HCFC, pero tienen un alto potencial de efecto invernadero y también están siendo gradualmente reemplazados por alternativas más sostenibles.
  • Hidrofluoroolefinas (HFO): estos gases refrigerantes son una nueva generación de refrigerantes que son menos dañinos para el medio ambiente en comparación con los anteriores gases refrigerantes. Los HFO son más eficientes desde el punto de vista energético y tienen un potencial de efecto invernadero muy bajo.
  • Amoníaco (NH3): este gas refrigerante es una alternativa natural a los gases sintéticos, es ecológico y no daña la capa de ozono. Sin embargo, el amoníaco es tóxico y debe ser manejado con cuidado.
  • Propano (R290) e isobutano (R600a): estos gases refrigerantes también son alternativas naturales a los gases sintéticos y tienen un bajo impacto ambiental. Sin embargo, son altamente inflamables y requieren un manejo seguro.

Nombres comerciales de los gases refrigerantes

Hay muchos nombres comerciales para los gases refrigerantes, ya que diferentes fabricantes pueden comercializarlos con nombres distintos. A continuación se enumeran algunos de los nombres comerciales más comunes para los principales tipos de gases refrigerantes:

  • Clorofluorocarbonos (CFC): Freon, Arcton, Frigen, Isotron
  • Hidroclorofluorocarbonos (HCFC): Genetron, Freon, Isceon
  • Hidrofluorocarbonos (HFC): Puron, Genetron, Freon, Forane
  • Hidrofluoroolefinas (HFO): Opteon, Solstice, Enovate, Performax
  • Amoníaco (NH3): R717, Anhydrous ammonia
  • Propano (R290): Care 40, R290, Chillquick, Klea 35
  • Isobutano (R600a): R600a, Isobutane, Care 10

Recuerda que estos nombres comerciales pueden variar según la región geográfica y el fabricante, y que es importante seleccionar el gas refrigerante adecuado para tu sistema de enfriamiento según las especificaciones del fabricante y las normativas locales.

Los Gases Refrigerantes en Italia

En Italia, la compra y manipulación de gases refrigerantes están reguladas por normativas específicas para reducir el impacto ambiental y garantizar la seguridad. Para obtener gases refrigerantes en Italia, es necesario:

  1. Poseer un certificado de formación: Para comprar y manipular gases refrigerantes, es necesario poseer un certificado de formación emitido por una entidad acreditada. Este certificado demuestra que has sido formado en las técnicas de manejo, mantenimiento y eliminación de gases refrigerantes.
  2. Comprar a un proveedor autorizado: Los gases refrigerantes deben ser comprados a un proveedor autorizado que pueda demostrar su conformidad con las normativas nacionales y europeas. Además, los proveedores autorizados tienen la obligación de recoger y eliminar los gases refrigerantes agotados de manera segura y ecológica.
  3. Utilizar el equipo adecuado: La manipulación de gases refrigerantes requiere el uso de equipos especializados, como bombas, tubos, cilindros y válvulas. Es importante utilizar solo equipos certificados y conformes a las normativas para garantizar la seguridad y prevenir posibles fugas de gases refrigerantes.
  4. Cumplir con las normativas ambientales: El uso de gases refrigerantes está regulado por normativas nacionales y europeas, como el Reglamento F-Gas de la Unión Europea. Es importante cumplir con estas normativas para reducir el impacto ambiental de los gases refrigerantes y garantizar la seguridad del personal y del público.

En resumen, para obtener gases refrigerantes en Italia, es necesario poseer un certificado de formación, comprar a un proveedor autorizado, utilizar el equipo adecuado y cumplir con las normativas ambientales.